Conoce a Dewey leemáslibros, el gato que inspiró el título de mi blog


27 de noviembre de 2010

"SEDA" de Alessandro Baricco


De un tiempo a esta parte, tengo la costumbre de leer dos libros al mismo tiempo. Uno tocho y pesado para leer en casa tranquilamente en el sofá o en la cama y otro fino, ligero y de tapas blandas, para llevar en el bolso cuando salgo de casa.

Y "Seda" es uno de estos últimos, que por ser fino, se lee en dos sentadas. Las críticas que había leído con antelación, siempre habían sido buenas, o más que buenas y esto, unido a que ya disfruté mucho con otro libro de este mismo autor, también descrito en este blog ("Novecento, la leyenda del pianista en el océano"), hizo que me decidiera a saborearlo.

Y realmente lo he saboreado. Me gustaría saber explicar lo que este novelista, dramaturgo, y periodista italiano me transmite, con su estilo tan particular, siempre mezclando narrativa con cuento, un toque de ficción y poesía, que te hace percibir un tono musical y etéreo en cada una de sus frases.

Ambientado en el año 1861, Lavilledieu, un pueblecito de la Francia meridional que vivía de el comercio de la seda.

Hervé Joncour compraba y vendía gusanos y sus huevos. En aquella época, casi todos los viveros europeos sufrían la epidemia de pebrina, que malograba el cien por cien de los mismos. Por eso, todos los años, a principio de enero, partía rumbo a Asia, Egipto, abandonando a su mujer Héléne durante unos pocos meses.

"Atravesaba mil seiscientas millas de mar y ochocientos kilómetros de tierra. Seleccionaba los huevos, discutía el precio, los compraba. Después, retornaba. Atravesaba ochocientos kilómetros de tierra y mil seiscientas millas de mar y volvía a Lavilledieu, generalmente el primer domingo de abril, generalmente a tiempo para la misa mayor"


Pero muy pronto la epidemia se extiende por el mundo y Baldabiou, el mayor terrateniente del pueblo, dueño de siete hilanderías, llegó a la conclusión de que la única manera de tener huevos sanos era comprarlos en Japón. 


Hervé fue el elegido para tamaña empresa, preguntando al enterarse: "¿Y donde quedaría, exactamente, ese Japón? Baldabiou levantó el extremo de su bastón, apuntando con él más allá de los tejados de Saint-August y dijo: siempre recto, hasta el fin del mundo"

Y así, en su primer viaje a Japón, conoció a un hombre peculiar, Hara Kei, el que le iba a proporcionar los huevos de los gusanos de seda y a aquella mujer,
"de ojos sin sesgo oriental, cuyo rostro era el rostro de una muchacha" y a la que nunca llega a escuchar su voz    

En el segundo viaje, ella le entrega una hoja de papel, con unos ideogramas dibujados en japonés. A su regreso a Lavilledieu, visita a madame Blanche, una japonesa dueña de un burdel, que en los dedos, como si fuesen anillos, llevaba unas pequeñas flores de color azul intenso. Se la tradujo:
"regresad o moriré", decía la nota.

En el tercero, ella le buscó:
"Se acercó, le cogió una mano, se la llevó a la cara, la rozó con los labios y después... desapareció en la noche, como una pequeña luz que huye"  

Cuando llega el momento de hacer el cuarto y último viaje, Japón está en guerra y es peligroso entrar en el país. Tanto Baldabiou como su esposa intentan disuadirlo, pero él insiste en que quiere volver a ese país. 


Y vuelve, viéndola por última vez en una caravana que huye de su aldea, pero "Hervé Joncour no sintió que ninguna explosión deshiciera su vida" y regresa junto a Héléne con un puñado de huevos inservibles, muertos.

Seis meses después de su regreso, recibe un sobre color mostaza con siete hojas de papel, con tinta negra e ideogramas japoneses.

Vuelve a ver a madame Blanche, para que se la traduzca. La carta empieza de la siguiente manera:
"Sigue así, quiero mirarte, yo te he mirado mucho, pero no eras para mi, ahora eres para mi, no te acerques te lo ruego, quédate donde estás, tenemos una noche para nosotros y yo quiero mirarte, nunca te he visto así, tu cuerpo para mi, tu piel, cierra los ojos y acaríciate, te lo ruego" Y acaba así:"No nos veremos más, señor. Lo que era para nosotros lo hemos hecho, y vos lo sabéis. Creedme, lo hemos hecho para siempre. Preservad vuestra vida resguardada de mí. Y no dudéis ni un instante, si fuese útil para vuestra felicidad, en olvidar a esta mujer que ahora os dice, sin añoranza, adiós".

Al cabo de unos años Héléne muere y un día
"al acudir al cementerio, halló, junto a las rosas que cada semana depositaba sobre la tumba de su mujer, una coronita de minúsculas flores azules" 
 No se lo pensó dos veces y comienza a buscar a madame Blanche que ahora vive en París. Cuando la encuentra, le dice nada más verla: "aquella carta la escribisteis vos, ¿verdad?. Tras un silencio, contesta: Aquella carta la escribió Héléne. La traía ya escrita cuando vino a verme. Me pidió que la copiara en japonés. Quiso incluso leérmela, aquella carta. Tenía una voz muy hermosa. Y leía aquellas palabras con una emoción que no he conseguido olvidar. Era como si fueran de verdad suyas. ¿sabéis Monsieur?, yo creo que ella hubiera deseado, más que cualquier otra cosa, ser "aquella mujer". Yo se que es así"
Historia mágica, melancólica, tierna, seductora.

23 de noviembre de 2010

"EL RAPTO DEL CISNE" de Elisabeth Kostova


No soy de las que se leen varios libros seguidos del mismo autor, por mucho que me apasione una lectura. Más bien prefiero picotear y conocer otros estilos de narrativa.

Pero en este caso he repetido con Elizabeth Kostova. Me leí su primera novela "La Historiadora" (2005), producto de una exhaustiva labor de investigación, donde entremezcla la realidad con la ficción, convertida en best seller en Estados Unidos y en algunos países europeos y que a mí, personalmente, no me emocionó.

Tengo que decir que ha sido un regalo de una amiga (la misma que me regaló La Historiadora) y que lo he devorado con ganas. Como a la mitad del libro reconozco que me atasqué un poco, aunque en ningún momento se me pasó por la cabeza abandonarlo, en seguida volvió a captar toda mi atención.

¿De qué trata esta historia? Pues os diré que habla del Impresionismo, (mi corriente de arte preferida), de artistas, de cuadros, de genios, de enfermos y enfermedades mentales, de amor y desamor…

Uno de los dos protagonistas, Andrew Marlow, psiquiatra que ya ha pasado la cincuentena y  pintor en sus ratos de ocio, recibe un día la llamada telefónica de su amigo el doctor John García, exponiéndole lo acaecido a su paciente Robert Oliver, pintor de profesión, detenido por intentar acuchillar un cuadro de la Galería Nacional de Arte en Washington.

Le pide a Marlow que se encargue de su terapia en el centro para enfermos mentales donde él trabaja, ya que desde su detención no ha pronunciado ni una palabra. Bueno, sí, antes de caer en el mutismo más absoluto, la única frase que sale de sus labios es “lo hice por ella”

Pero ¿Quién es ella?

Muy pronto, este caso clínico pasa de ser una motivación profesional, a una obsesión en la que se ve inmerso, casi sin darse cuenta.

Indaga e indaga en su vida pasada, en las relaciones con su ex mujer, con su ex amante, en unas cartas de amor en manos de su misterioso paciente, escritas a finales del siglo XIX entre Béatrice de Clerval y Olivier Vignot, dos pintores envueltos en una trama de extorsiones y traiciones en el Impresionismo francés de esa época.

Poco a poco se da cuenta de un hecho insólito: Robert está obsesionado y enamorado de “ella”, Béatrice, fallecida hace más de un siglo y a la que pinta de forma compulsiva, desde que la vio por primera vez en un lienzo de la Galería Nacional. En su larga carrera profesional, nunca se ha enfrentado a un caso parecido.



Tras descubrir todos los entresijos de la historia, y los motivos de la pérdida de cordura de su paciente, consigue las claves para su curación. Tendrá que estar toda la vida con un tratamiento exhaustivo, pero parece que volverá a ser una persona “normal”. Y lo pongo entre comillas, porque Robert siempre ha sido un tipo peculiar, raro, extraño, distinto, en definitiva un gran artista.

La autora intercala las pesquisas de Marlow, con la narración de la vida personal del psiquiatra, que comienza una relación amorosa con Mary, la ex amante de Robert.

Ha sido una grata sorpresa para mí el hecho de que en el libro que hoy describo, Kostova ha obviado las descripciones demasiado meticulosas sobre cualquier ambiente, objeto o situación que hacía en La Historiadora, algo que en el fondo temía un poco.  

9 de octubre de 2010

"FLOR DEL DESIERTO" de Waris Dirie

Este libro que está basado en un hecho real, describe la vida de Waris Dirie, una famosa modelo nacida en el desierto de Somalia en 1965,  que actualmente vive con su hijo en Viena  y que a día de hoy sigue adelante con su encarnizada lucha contra la ablación femenina, una práctica todavía muy frecuente en los tiempos que corren, en África y otros países musulmanes  y que ella sufrió en sus propias carnes.

Este rito ancestral y salvaje, acaba con la vida de multitud de niñas cada año. Muchas mueren desangradas y otras muchas por infecciones fulminantes.

Waris,  que en somalí significa “flor del desierto”, además de modelo, es escritora de varios libros,  embajadora de la ONU a favor de los derechos de las mujeres y los niños en África y ha rodado un documental sobre su vida para la BBC.

En 2009 se estrenó la película interpretada por la modelo etíope Liya Kebede y con el mismo título que este,  su libro, que hoy describo.

Miembro de una familia nómada que busca constantemente agua y pastos para sus animales, ella recuerda con nostalgia los primeros años de su vida: “Aquellos atardeceres constituyen mis mejores recuerdos de Somalia: sentada con mis padres, mis hermanas y mis hermanos, cuando todos estábamos hartos y todos reíamos. Siempre tratábamos de mostrarnos animados y optimistas. Nadie se quejaba, ni gimoteaba, ni decía cosas como ¡eh, hablemos de la muerte!. La vida era muy dura, precisábamos toda nuestra energía vital para sobrevivir y ser negativos nos la agotaba”

Con seis años ya tiene a su cargo y bajo su responsabilidad un gran rebaño de ovejas y cabras y apenas cumplidos los cinco, sufre esa experiencia tan horrible como injusta, a la que consigue sobrevivir  y que le dejará marcada para el resto de su vida. Es la parte más dura de toda la narración, unos párrafos que consiguen ponerte la carne de gallina, que te dejan un sabor agrio y una sensación de estupor e incredulidad ante la mera existencia de estos hechos.

A los 13 años, su padre decide casarla con un hombre de 60 y esto desencadena su huida, ayudada por su madre, a Mogadiscio, donde vive un tiempo con su hermana, después con una hermana de su madre, hasta que conoce al embajador somalí en Londres, casado con otra tía suya que le brinda la oportunidad de viajar a Londres, trabajando como asistenta en su casa.

Tras un tiempo de duro trabajo en la casa del embajador, es descubierta con 18 años por un famoso fotógrafo Terry Donaldson y de ahí su salto al mundo de las pasarelas internacionales, donde consigue abrirse camino a base de esfuerzo y sacrificio.

Consigue trabajos para Vogue, Chanel,  Revlon, diversas marcas de ropa y en la cumbre de su carrera, cuando su presencia es constante en las pasarelas de Londres, Milán, París, Nueva York, recibe la propuesta de hacer un documental sobre su vida para la BBC. Accede a la misma a cambio de que le ayuden a encontrar  a su madre

De vuelta a Somalia, consiguen dar con ella. Waris intenta convencerla para llevársela consigo a Europa, pero no lo consigue “No, si quieres hacer algo por mí, consígueme un lugar en África, en Somalia, al que pueda ir cuando me canse. Este es mi hogar. Es lo único que he conocido”

Se enamora, se casa y a los 30 años tiene un hijo Aleeke, que en somalí significa “león fuerte”.

Tras la publicación de una entrevista en la revista Marie Claire, donde relata su horrible vivencia, comienza su pertinaz lucha para ayudar a las mujeres de África y conseguir abolir la mutilación genital femenina desde su puesto de embajadora especial de la ONU y la Fundación Waris Dirie.

Resumiendo, un libro conmovedor. Tres años después de publicarse Flor del desierto, escribe su segundo libro, “Amanecer en el desierto”.  Es más que probable que más adelante decida leerlo.

8 de octubre de 2010

"EN TIEMPOS DE PRODIGIOS" de Marta Rivera de La Cruz



Me ha gustado más de lo que me imaginaba. Fue una recomendación de una compañera de trabajo y reconozco que en un principio no me apetecía demasiado leerlo, aunque quizás sea demasiado triste.

La autora narra dos historias de forma paralela.

Por una parte Cecilia, sumida en una profunda tristeza por dos hechos recientes y trascendentales ocurridos, la ruptura con su ex pareja, con el que ha convivido los últimos años de su vida y lo que más le aflige, la muerte de su madre a la que adoraba y con la que mantenía una relación muy especial.

Cuenta en primera persona sus sentimientos, su sensación de tremenda añoranza, de pérdida irreversible y desoladora. 

Quizás ese lado de la historia haya sido la que más me ha gustado porque transmite un mensaje de esperanza en la aceptación de los golpes más duros que nos depara la vida, de como el tiempo hace que uno sea capaz de recordar con gratitud, aunque también irremediablemente con cierta nostalgia, los momentos felices pasados junto al ser amado.

Por otra parte, otro personaje importante es Silvio, el abuelo de Elena, la mejor amiga de Cecilia, que se ha quedado solo en Madrid.

Cecilia es la encargada de ir a visitarle de vez en cuando, para hacerle compañía y comprobar su estado de salud. 

Aunque al principio dicha misiva no es acogida con demasiado agrado por ambas partes, al final se cogen verdadero cariño y afecto. 

Comparte con ella su historia, su pasado. Una historia que también consigue engancharme.

Comienza narrándole su infancia, que transcurre  en Rivanoba, un pueblecito del norte de España. 

Cuando tiene 8 años, conoce a dos personas que tendrán una influencia decisiva en su vida, el americano Zachary West y su hijo adoptivo africano Elijah, de su misma edad. 

La estrecha relación con ambos, le brinda a Silvio la oportunidad de conocer mundo y una vida de lujos. Elijah y Silvio se convierten en íntimos amigos, casi hermanos, surgiendo entre ellos una relación de autentica camaradería que perdurara para siempre.

En uno de sus múltiples viajes los tres juntos, conocen a los Sezsmann: Amos, un músico judío y su hijo y pupilo Ithzak, ambos personajes también muy influyentes en la vida de Silvio.

Pero todo se ve truncado primero por la guerra civil en España y después por la segunda guerra mundial.

El distanciamiento sucede cuando Silvio debe luchar en el frente en contra de su voluntad. Esta dura experiencia le hace cambiar su percepción de la vida y le sume en una aptitud de apatía, desgana y desinterés por todo cuanto le rodea.

Pero el destino hace que se reencuentre con Zacahary, quien le confiesa que desde hace muchos años trabaja  como espía para el gobierno americano. Además le auguria las terribles pretensiones de Hitler en Alemania. 

Como Silvio trabaja en el Ministerio, Zachary le pide ayuda para sacar a los dos judíos de Varsovia ante la inminencia de la guerra y él se  niega.


Los años pasan y cuando la guerra acaba, se van enterando de las atrocidades cometidas por los nazzis y descubren que sus grandes amigos polacos han muerto.

Entonces Silvio, arrepentido y con profundo sentimiento de culpa por no haber intentado ayudarles a escapar de Polonia, se une a Zachary West para desenmascarar a los  prófugos asesinos nazis que pretenden establecerse en otros países, haciendo de espía en el ministerio.

Esta decisión, la de formar parte de la “Organización”, hace que deba renunciar al verdadero amor.

Y el final de las dos historias, lo dejo en el aire, para incitaros a su lectura, más que recomendable.

Este libro, asi como el de mi próximo post, los leí durante el mes de agosto y septiembre, en vacaciones, pero después, por unas cosas o por otras, no he conseguido sacar tiempo para escribir y por eso, ahora los describo muy seguidos el uno del otro.



16 de agosto de 2010

"LO BELLO Y LO TRISTE" de Yasunari Kawabata


Esta novela bella y triste a la vez, como su título, ha sido una recomendación de una usuaria que solicitó mi ayuda para encontrar libros de este autor japonés, en la biblioteca.
-- Pero, ¿no te has leído nada de él?, me pregunta sorprendida.

Cuando la acompaño a la estantería lo coge, lo pone entre mis manos y me dice:
-- Tienes que leerlo, es maravilloso.
Y también a mi me lo ha parecido, aunque se me ha hecho muy corto, me daba mucha pena ver cómo iba pasando las hojas y me acercaba a su final.
Otoko, tan sólo una niña de 15 años y Oki que le dobla la edad, tienen un romance intenso e imposible. Imposible, porque él tiene mujer y una hija, una vida construida. Ambos se enamoran hasta los huesos y ese amor nunca los abandonará, perdurará para siempre en sus corazones.
Embarazada de una niña que muere al nacer y abandonada por Oki, se traslada junto a su madre a Kioto, para intentar rehacer su vida, tras un intento infructuoso de suicidio y se convierte en una famosa pintora de arte abstracto.
Él por su parte también intenta seguir adelante con su vida y alcanza el éxito como escritor con su novela "Una chica de dieciséis" que relata la historia de ambos y que provoca muchos celos en su esposa Fumiko, al corriente de todo.
20 años después vuelven a encontrarse en la celebración del año Nuevo, pero no están solos, ella quiere mantener las distancias y acude acompañada de Keiko, su discípula y  amante.
 Keiko, que siente una cegadora e incondicional pasión por su maestra, consciente de que el tiempo no ha eclipsado ni un ápice sus sentimientos hacia él, sólo piensa en vengarla, aunque Otoko no quiere venganza.
Urde un meticuloso plan para arruinar la vida de Oki y consigue seducirle, pasando juntos una noche. Luego consigue atrapar entre las redes de sus encantos a su hijo menor, Taichiro.

Y cuando comienzas a preguntarte  si realmente Keiko se ha enamorado de Taichiro en contra de sus deseos, sucede el trágico desenlace. Ella planea una excursión con él en lancha por el lago Biwa y tienen un accidente. Keiko despierta en la cama del hotel fuera de peligro, pero él está desaparecido.
Cito textualmente el último párrafo del libro:
"Otoko se sentó en la cama y observó el rostro dormido de la joven. De la comisura de los ojos de Keiko salía un reguero de lágrimas. Keiko abrió los ojos. Las lágrimas seguían brillando en ellos cuando miró a Otoko"
Acabo de leerlo y me quedo un buen rato pensando en el final. Creo que puede ser interpretado de varias maneras:
-- Keiko se ha enamorado de Taichiro, algo que no entraba en sus planes y cuando realmente se siente feliz a su lado, el destino les juega una mala pasada y tienen el fatídico accidente.
-- Ella sigue locamente enamorada de su maestra, pero es muy buena actriz y consigue engatusar con su audacia y su belleza al padre y al hijo, cumpliendo a rajatabla el plan urdido con alevosía y premeditación, vengando a Otoko, quien en realidad no quiere ser vengada.
-- Y la interpretación más verosímil a mi parecer: Keiko se ha enamorado de Taichiro, pero a pesar de todo sigue adelante con su plan de venganza y por ello llora amargamente cuando se despierta tras el accidente y es consciente de lo que ha hecho.
Quiero recalcar que se deja en el aire lo que sucede con Taichiro. Tan sólo se cuenta que está desaparecido y que le están buscando desesperadamente. Cada lector puede decidir si al final lo encuentran con vida o lo que es más probable, que encuentran su cadáver ahogado.
Me ha parecido una novela muy interesante, muy bien escrita y que no os podéis perder. Me estoy aficionando a los autores japoneses...   


15 de agosto de 2010

"LA HISTORIA DEL REY TRANSPARENTE" de Rosa Montero



"Soy mujer y escribo. Soy plebeya y se leer. Nací sierva y soy libre. Me recuerdo arando el campo con mi padre y mi hermano, hace tanto tiempo que parece otra vida".
Así comienza este libro que nos cuenta una maravillosa historia, mitad real, mitad fantástica, ambientada en el sur de Francia, siglo XII, tiempos de guerras, de luchas religiosas y de la Gran Cruzada contra los cátaros, herejes víctimas de la despiadada Inquisición.
La propia protagonista, Leola, narra su historia en primera persona, desde que su vida se ve truncada por la  guerra librada entre el rey de Francia y el rey de Aragón. Tiene 15 años y está a punto de casarse con Jacques, su Jacques, su gran amor desde que tiene uso de razón, cuando se lo llevan a la fuerza al campo de batalla, junto a su padre y a su hermano Antoine.
Para salir adelante y pasar desapercibida, decide ponerse la armadura de un guerrero muerto y hacerse pasar por hombre, comenzando así su andadura en solitario, sin rumbo ni destino predeterminado.
Tras algún que otro percance del que sale bien parada, libera a una mujer colgada de un árbol, boca abajo, que grita auxilio. Es Nyneve, una supuesta bruja y hechicera, que se convierte a partir de entonces en su mejor amiga, su escudera y compañera de aventuras y desventuras, hasta el final de sus días
El Maestro Roland, amante secreto de Nyneve, le enseña el arte de guerrear y Guy, su hijo, un gigantón enigmático, vestido todo de hierro, siempre les observa desde la lejanía.
Un día, Guy les abandona en pos de un grupo de peregrinos que se dirigen a tierra santa para salvar sus almas y Roland va tras él.
Juntas siguen su errante camino hasta que conocen a Dhuoda, la Dama Blanca, con un pasado trágico y que las cobija en su castillo, colmándolas de toda clase de riquezas y caprichos.
Leola sigue haciéndose pasar por hombre y Dhuoda se enamora de él, o mejor dicho de ella, porque en uno de los últimos capítulos, le confiesa que ya desde el principio, adivinó su condición femenina. Le enseña a leer, a escribir y las introduce en la corte de Leonor de Aquitania, viviendo una etapa tranquila y feliz.
Al cabo del tiempo, deciden abandonarla, pesar de sus vanos intentos por disuadirlas, cuando constatan su enorme crueldad y falta de compasión. Pero antes, Leola es nombrada caballero "Señor de Zarco".
A partir de entonces, Leola se convierte en "Mercader de sangre", un grupo de guerreros despreciados por toda la Cristiandad y conoce de nuevo el amor, con Gastón, un atractivo alquimista, pero es engañada y traicionada por él, delatándola a la inquisición, cuando ella intenta ayudar a una mujer cátara. Son apresadas y conducidas de nuevo al castillo de Dhuoda, gran aliada del Santo Padre y del régimen inquisitorial.
Ésta, aunque siente renacer su amor por Leola, las sentencia a ser quemadas en la hoguera al día siguiente, pero consiguen escapar.
Huyendo de sus perseguidores, llegan a la abadía de Fausse-Fontevrault habitado por hombres y mujeres, que cuenta con una magnífica biblioteca. Aquí es donde nuestra protagonista decide comenzar a escribir una enciclopedia escrita en lenguaje popular.
 Muy pronto deben continuar  su andadura y se establecen en una ciudad llamada Samatan, donde encuentra a su verdadera familia: Alina, una mendiga ciega, con una venda en los ojos y que al final no era ciega, León el nuevo amor de Leola, un gigante que sufre el “Gran Mal” (ataques epilépticos) y que la salva de una emboscada propiciada por La Dama Blanca  y Filippo, un eunuco sordo con todo el cuerpo tatuado al que encuentran con un collar al cuello y al que consiguen liberar. Y a ellos sí que les confiesa que es una mujer,  volviendo a recuperar su verdadera identidad.
Y mientras la guerra va mal, muy mal, el Papa ha creado el Santo Tribunal de la Inquisición y los inquisidores saquean las ciudades, quemando a los supuestos herejes.

De nuevo deben huir, llegan a Montségur, un pueblecito del condado de Tolosa, en la cima de los Pirineos, donde se reencuentran con Guy, el hijo de Roland, su maestro, que entra a formar parte de su extraña y peculiar familia.
Pero la felicidad que no es eterna, dura poco y llega al pueblo un buhonero con noticias frescas: el ejército del senescal está a una semana de distancia. El final se acerca y mientras tanto, el mundo roza lo perfecto.
Tras casi un año resistiendo el asedio, están vencidos, tienen que rendirse. Pero antes de la rendición, escogen a un puñado de hombres y mujeres, los más sanos, los más fuertes, los elegidos para salvar sus vidas escapando por un túnel excavado en la montaña, conducidas por Leola y Nyneve, para seguir promulgando sus ideales por el mundo.
Y eso intentan, escapar, hacia el reino de Navarra o Aragón y la huida los dispersa en dos grupos, perdiendo la pista a León, Alina y Filippo.
El destino, en este caso caprichoso, hace que regresen al lugar donde todo comenzó, las tierras del señor de Abuny, donde ella nació, su antigua casa. Vuelve a ver a su Jacques, que ya no es su Jacques, que no la reconoce cuando le cuenta el paradero de su padre y su hermano, cuando le cuenta que todos consiguen regresar con vida, que su hermano perdió un ojo, un día se marchó y no volvió y que su padre murió varios años después.        
Rumbo a Cremona, se refugian en una fortaleza y es allí donde Nyneve le hace partícipe de sus intenciones de tomarse el elixir ambarino que guarda celosamente, para acabar con todo. Está mayor, está cansada y no aguanta más. Le pide a su amiga que le acompañe en su viaje, que hay elixir para todos, pero ella presiente que León está vivo y prefiere seguir luchando.
 Esta es la parte más triste de esta historia, cuando su fiel compañera, la amiga con la que ha compartido los últimos 25 años de su vida, decide irse, poner fin a su sufrimiento.
Y cuando van a ponerse en camino de nuevo, llegan los cruzados. Ahora si que están acorralados, no tienen escapatoria y como la muerte en la hoguera le aterroriza, decide tomarse el preciado elixir.
 Pero antes de reunirse con su fiel compañera, recibe un regalo inesperado, la certeza de que León, Alina, Filippo y el resto del grupo que huyó con ellas de Montségur y del que no tenían noticias desde entonces, se han salvado, están vivos. Y escribe:
"Tengo cuarenta años, ¿porque cuesta tanto morir si no cuesta nacer?. He visto cosas maravillosas. He hecho cosas maravillosas. Los días se han deshecho entre mis manos como copos de nieve. Que poco dura el sueño de la vida..."
Y la "historia del rey transparente",  ¿dónde queda? Su comienzo se narra varias veces en diversos capítulos del libro, pero como curiosamente esto acarrea una desgracia a la persona que empieza a contarla, nunca llegamos a conocer su final.
Me sorprendo cuando, concluida la lectura del libro, descubro que en el apéndice aparece descrita la historia completa, pero a pesar de leerla con mucha curiosidad, me quedo sin conocer el motivo por el que nadie puede terminar su narración, sin dejar de sufrir un grave percance, o incluso la muerte. La historia dice así:
"En los tiempos antiguos existió un reino ni grande ni pequeño, ni rico ni pobre, ni del todo feliz ni completamente desgraciado..."
María lo recomendó en este blog y me ha enganchado desde el comienzo, me ha parecido una historia preciosa, original, con muchas frases que te hacen pararte a pensar, un libro que quizás algún día vuelva a leer. 

29 de junio de 2010

"LOS BOSQUES DE UPSALA" de Álvaro Colomer


"Existía un bosque allá en la Europa vikinga, al que acudían los ancianos que habían dejado de ser útiles a la comunidad. Así que se adentraban esos hombres en la espesura, anudaban las sogas a las ramas y se dejaban caer con el orgullo de quien no titubea siquiera ante la muerte. Dicen las crónicas que nadie descolgaba jamás sus cuerpos. Sabemos hoy que aquel lugar, perdido por siempre en la noche de los tiempos, no era otro que los bosques de Upsala"

Así comienza este libro, que se adentra en el intrincado laberinto de la mente de las personas depresivas, que sólo piensan en el "suicidio", palabra que parece estar omnipresente en la vida de Julio, protagonista de la historia, entomólogo dedicado en cuerpo y alma a la busca y captura del primer mosquito tigre en España.

De niño, cuando sólo contaba con ocho años, vio algo que nunca tendría que haber visto y que le marcó para siempre. Presenció cómo su vecina se tiraba por el balcón delante de sus propias narices, después de dirigirle una tierna sonrisa y unas breves palabras "hasta otra Julito". Este trauma clavado en su cabeza, marcó toda su infancia, convirtiéndole a partir de ese momento en un niño "metido hacia adentro", introvertido y poco comunicativo

El día de su quinto aniversario de bodas con Elena, recién salida ésta de una severa depresión,  la encuentra metida en un armario inconsciente, con una sobredosis de pastillas en el cuerpo.

El médico del centro donde es ingresada de urgencias, un tipo frío, al que "parece que le han borrado sus facciones" para que no demuestre sus emociones, con unos "botones por ojos" y una "cremallera por boca", en vez de tranquilizarle, sólo consigue transmitirle una profunda angustia, porque como le explica dicho individuo “casi todos los suicidas fracasados reinciden en su intento en el plazo de diez años". Al suicidio se llega por aprendizaje, su esposa ha ingerido un blíster entero de somníferos y no ha muerto. Ahora ha aprendido que un blíster no basta, por lo que dentro de un tiempo lo intentará con dos. Si fracasa de nuevo triplicará la ración. Y luego la cuadriplicará y entonces sí que morirá".

Lo único que podrá hacer en los próximos diez años para evitar que lo repita, será vigilarla muy de cerca, estar muy pendiente de todo lo que haga y hablar mucho con ella, para intentar vislumbrar pistas que delaten sus renovadas ganas de volverlo a intentar. Menudo panorama tan negro que le espera durante los próximos diez años...

Para colmo, cuando ella ya ha regresado del hospital, tras las inevitables veinticuatro horas de observación, recibe la llamada que tanto tiempo lleva esperando, "¡lo hemos encontrado Julio, lo hemos encontrado!", proclama desde el otro lado del teléfono, a grito pelado, Nuria, su ayudante de laboratorio.

De inmediato sabe que se refiere al Aedes Albopictus, ese diminuto mosquito al que lleva dos años persiguiendo, que produce molestas picaduras en las personas y enormes gastos a la administración pública.

Y ahora que parece que va a obtener su merecido reconocimiento profesional, su vida se ha desmoronado por completo. Como necesita ausentarse algunos días, si no quiere que Nuria se apropie de todos los méritos, Elena se niega a acompañarle y a él le aterra dejarla sola, lo único que se le ocurre es la ingeniosa idea de apuntalar ventanas y balcones, quitarle de en medio cualquier objeto punzante o peligroso y dejarla encerrada en su propia casa.

Cuando regresa con el bicho capturado, tras cuatro días de miedos, remordimientos e incertidumbres, la encuentra sentada en el mismo sitio donde la dejó. Estos días también ha podido reflexionar y cada vez lo ve más claro, si realmente ella quiere quitarse la vida, lo hará y él no podrá impedirlo, por muchos medios que disponga para evitarlo. Por eso, sintiéndose incapaz de continuar su vida sin ella, e  invadido por la enorme carga que le ha sido encomendada, decide acabar con todo.

25 de junio de 2010

"LA FÓRMULA PREFERIDA DEL PROFESOR" de Yoko Ogawa


Curioseando por las casetas de la feria del libro de Madrid, a mi amiga Mónica y a mi nos llamaron la atención dos libros de esta autora japonesa, de mucho éxito en su país. Este libro en concreto, ha sido todo un fenómeno social, con más de un millón de ejemplares vendidos en Japón en menos de dos meses. 

 La novela ha sido adaptada al cine, estrenándose la película en el año 2006 y lo cierto es que estoy deseando verla

Los tres personajes fundamentales de la historia son: una empleada del hogar, madre soltera, su hijo de diez años  y un viejo y peculiar profesor, exmatemático de profesión, que nunca sale de casa y que tuvo un accidente en el pasado, que le dejó una grave secuela: sus recuerdos se pararon en 1975 y a partir de ese momento su memoria sólo dura 80 minutos.

Para poder recordar las personas y las cosas importantes, pega por toda su ropa notitas informativas que producen un inconfundible crujido seco al andar.

La anónima asistenta (digo anónima porque curiosamente, creo que en todo el libro no se dice su nombre, así como tampoco el de su hijo y el profesor) comienza a trabajar en su aislado y miserable pabellón, contratada por la anciana cuñada, quien le pone una única condición, solucionar los problemas que le vayan surgiendo sin contar para nada con ella.

La primera pregunta que él le hace al conocerla es "¿que número de pies calzas?" (pregunta que le hará a menudo, al disponer de una memoria formateada cada día, cada mañana cada tarde...)

Al enterarse de que tiene un hijo, el profesor le pide que lo traiga con ella y pronto empieza a sentir un cariño muy especial por ese niño al que llama Root ("raíz cuadrada" por tener la coronilla plana y por ser según él "un signo generoso que puede dar refugio dentro de si a cualquier número, sin decir nunca que no a ninguno")  que hace aflorar en él un excesivo instinto protector".

Su obsesión por las matemáticas es tal, que cada aspecto de su vida cotidiana es observado bajo el punto de vista de los números y expresado en un curioso lenguaje matemático (números primos, números amigos, números perfectos, números triangulares, número pi, teorema de Fermat, Fórmula de Euler, su preferida, etc)

Además, los tres comparten su aficción por el equipo de béisbol profesional de Osaka, los Tigers de Hanshin y consiguen convencerle para ir a ver un partido en directo, pasando juntos una tarde inolvidable, que recordarán el resto de sus vidas.





Las últimas hojas del libro narran el ingreso del profesor por su cuñada en un centro especializado. Ellos no dejan de visitarle una o dos veces al mes hasta su muerte. La tarde de la última visita, Root tiene 22 años y acaba de aprobar unas oposiciones para ser profesor de matemáticas.

En resumen, el libro me ha gustado, creo que es original y me ha transmitido curiosidad por los números. De hecho de un tiempo a esta parte, me ha dado por analizar cada cifra significativa para mi, con la que me topo, comprobando si es o no un número primo. Pero también reconozco que tal vez, por tanta crítica favorable leída, o por excesivas expectativas vertidas sobre él, me ha defraudado un poco, pero sólo un poco.

6 de junio de 2010

"OCHO AÑOS DE SILENCIO" de Raquel Franco



Esta es la primera y de momento la única novela (editada en 2009) de Raquel Franco, una abogada catalana, autora también de la colección de cuentos “el pintor deshonesto”

La historia transcurre en “Arquía de la Millación”, un remoto pueblecito andaluz de izquierdas, en la previsible España nacional.

El alcalde, Domingo Sanfeliu, reúne a todos sus habitantes en la plaza para convencerles de la conveniencia de su rendición, ante la inminente llegada de los falangistas. Y esa es la última vez que lo ven con vida. Tan sólo una nota explicaba su desaparición. Su exnovia, Anita,  con la que había roto hacía menos de un mes, estaba embarazada y ambos marchaban lejos.

El 26 de agosto de 1936, tomaron el pueblo un grupo de hombres armados y ese fatídico día, comenzó para sus doce habitantes, ocho años de un silencio ensordecedor y tal como dice el libro, de “una calma artificial que precede a la muerte de un pueblo al que le han robado su descendencia, porque no pudieron robarle sus ideas” 

Y es que registrando una a una todas las casas, en busca de pruebas incriminatorias, encuentran una fotografía con una dedicatoria del presidente de la República a la famosa cantante, Mónica Portugal. Cuando su marido Don Segismundo está a punto de ser fusilado por ello, Martín, el soldado al mando la reconoce como la famosa gran artista que fue en su época y él que  siempre fue su más ferviente admirador, tras mucho meditarlo, toma una cruel decisión: separar a los niños de sus padres y llevarlos a una inclusa cercana, prohibiéndoles además a las mujeres volver a procrear.

Dos semanas después del secuestro de los infantes, llega a Arquía el corregidor, encargado de vigilarles desde una atalaya construida para este menester y desde la cual cree vislumbrar cada rincón del pueblo. Pero no es así, la llanura del bosque ha quedado fuera de la visión de los anteojos y es allí donde sus habitantes se reúnen para tomar decisiones importantes.

Y un día, transcurridos ya ocho largos años, tiene lugar un hecho que consigue sacar a todos del mutismo en el que estaban inmersos: encuentran en el bosque a una niña de unos siete u ocho años, una peluda fierecilla salvaje que comía comida cruda y andaba a cuatro patas.

Entre todos acuerdan que la chiquilla a la que llaman Anita, viva cada mes en una casa distinta, turnándose en su educación. Aportando cada uno su granito de arena, consiguen en cuatro meses que aprenda a hablar, a andar correctamente y a ser una personita civilizada. 


Y sucede lo inevitable, los arquienses son descubiertos y acusados de asesinar al corregidor, que ha muerto solitario en su atalaya. Pero esta vez tienen suerte y el comandante Ordoñez se apiada de ellos dejándoles marchar con la condición de quedarse con Anita.  

Y a estas alturas del libro se conoce lo que sucedió con el alcalde y su exnovia embarazada. Cuando al mismo Ordóñez se le encargó seguirles el rastro en su huída, cuando al fin los encontró, no tuvo el valor suficiente para matar a la mujer embarazada y la deja escapar. Ésta encuentra cobijo junto a una banda de forajidos con los que convive un tiempo, pero que también son descubiertos. Cuando van a ser detenidos, la niña escondida pensando que es un juego, consigue no ser descubierta y partir de ahí comienza su aventura en solitario, hasta ser encontrada por los habitantes de Arquía.

El destino final de Anita, es la misma inclusa donde fueron abandonados todos los niños de Arquía de la Millación, donde podrá  ser adoptada.

Es una historia contada con cierto sarcasmo, que te envuelve por completo desde el comienzo y que probablemente sea el reflejo de un sinfín de sucesos similares, acaecidos durante esos dramáticos años de guerra en nuestro país    



5 de junio de 2010

"EL RELÁMPAGO INMÓVIL" de Pedro García Montalvo




Los cuatro protagonistas de esta historia son el matrimonio formado por Inma y Adrián, el senador Mateo Salazar, padre de Adrián y Cecilio Toval. 
La pareja, lucha a diario por superar un terrible suceso ocurrido un año atrás, la muerte por accidente de sus dos únicas hijas, María la mayor de diez años y Cheli de seis, en un desprendimiento de nieve. 
Para ellos la vida se detuvo de repente, como un relámpago inmóvil en medio de una gran tormenta.
Parece que el tiempo ha empezado a curar sus heridas y ambos sienten que la desgracia, lejos de separarles, ha fortalecido más su unión.
Poco antes de morir las niñas, el senador descubre una trama de corrupción inmobiliaria en la que está implicado un miembro adinerado de la familia de Cecilio y éste, a pesar de ser considerado por todos un buen hombre, vive atormentado y obsesionado por sus ansias de venganza contra Mateo, al que culpa del suicidio de su hermano y la enfermedad mental en la que está sumido su hijo.
Con paciencia lo planifica todo y aunque en muchos momentos no sabe si será capaz cumplir sus objetivos, al final se deja llevar por el rencor y le envía a Inma unas fotos que han caído en sus manos, de Adrián con su ex novia, los dos en actitud cariñosa.
Pero la verdad es que la relación entre ambos es únicamente de amistad y apoyo mutuo. Ella ha estado a su lado en los peores momentos y le ha ofrecido el consuelo que Inma no podía darle, por estar también inconsolable.
Al final, asistimos a un final feliz, todo se aclara y deciden seguir juntos por el camino de la vida.
¿Qué si me ha gustado? Bueno, pues digamos que se deja leer, pero reconozco que en más de una ocasión estuve tentada de abandonar su lectura.
Sólo me ha dejado el enriquecedor mensaje de que en la vida es mejor perdonar. Que la venganza y el rencor no nos llevan a ninguna parte y mucho menos al olvido